martes, 25 de septiembre de 2012

Una experiencia inolvidable

Cada vez que voy a la panadería de mi barrio (Panadería Manchego) vivo una experiencia inolvidable,  esa es la fuerza de las pymes.

Cuando de negocios se trata, la innovación y el servicio al cliente tienen que ser una constante. El ofrecimiento de un producto o servicio debe de convertirse en toda una experiencia para que los clientes regresen. Desde el saludo, la ambientación y el trato, hasta la música y decoración; son detalles que calan en el consumidor.
Para muchas pequeñas y medianas empresas (pymes) el primer reto es conseguir clientes, y se obsesionan en lograr ese volumen de visitantes pero se olvidan de crear la atmósfera adecuada para que estos clientes regresen. Una experiencia agradable y cálida es el inicio para el posicionamiento de una marca. La fidelidad del consumidor surge en muchas ocasiones por la empatía y confianza que le genere el comercio o el profesional de servicios.
Los emprendedores  y emprendedoras poseen un talento que supera todos los demás y ese debe ser el que está en venta. El abogado, el repostero, la contable o la diseñadora no tienen por qué saber de estrategias de ventas y servicio al cliente: están enfocados y enfocadas en su expertise. Ese talento aporta un 50% y la experiencia que el cliente tenga representa el 50% restante. Ya sea bienes de consumo o de servicio, la experiencia que viva el cliente es la que determinará su retorno. Reconociendo que ese otro 50% no se enseña en la academia, a continuación comparto algunos puntos vitales para el éxito en la gestión diaria de los emprendedores:
1.       Una sonrisa. Sí, puede sonar trivial pero una sonrisa es el inicio de una amistad. Cada cliente que entre a su local debe recibir un trato cálido acompañado de una sonrisa, recuerde que su amistad ahora continuará en la red. En tiempos donde la sociedad está literalmente enredada en internet y se crea fidelidad a través de redes sociales, la amistad con sus clientes pasa de la puerta de salida, sigue online. Recuerde que el cliente ahora es como un crítico de cine y su reseña  puede aparecer  en facebook o en twitter…si fue mala o buena allí estará. Así que hagamos todo lo posible porque sea una experiencia agradable.
2.       Consistencia: Igualmente si el cliente vino recomendado por un tercero es muy importante que la satisfacción que sienta sea igual o similar a la que le contaron.  ¡Nada más desagradable que recomendar un negocio y te llamen para quejarse del servicio que le dieron! La consistencia en el servicio y en el trato deben ser prioridad para todo negocio. Si es un servicio profesional el mismo debe ser siempre realizado con entrega y compromiso. Si es un bien de consumo debe ser de calidad probada.
3.       Servicio al cliente: Además de sonreír y ser constantes  debemos tomar en cuenta los detalles. Hablar con clientes para saber su opinión acerca de nuestro servicio, conocer sus inquietudes y ponerlas en práctica. Creación de eventos, ofertas especiales o servicios adicionales para satisfacer las necesidades de tus clientes. Llamadas, e mails, mensajes en redes sociales y  actividades especiales son verdaderamente apreciadas.
4.       Networking: El intercambio de servicios entre pymes para lograr expandir la cartera de productos y servicios siempre es una buena opción. Y si tu proveedor puede ser uno de tus clientes, será mucho mejor.
5.       Innovación: Lograr un posicionamiento muchas veces depende del grado de innovación del negocio.  ¡Ojo! La innovación no es únicamente tener los últimos estilos o productos más in, ni tampoco ofrecer un servicio profesional único en Puerto Rico. Un emprendedor innovador es aquel que realmente trata a sus clientes con respeto, cariño y profesionalismo. El servicio al cliente está tan escaso, que el cliente lo apreciará y te distinguirá entre tu competencia.
      Fortalecer la economía de Puerto Rico está en manos de todos y todas. De nada vale que se fomente“apoyar lo hecho en Puerto Rico” si cuando lo auspician reciben un trato desagradable o un servicio o producto pobre. Haz todo lo posible porque el pueblo te apoye, trabaja con esmero, pasión y compromiso. Ofrece a tus clientes una experiencia inolvidable. 

Y este, al igual que el mío en la foto superior, es el rostro que queremos para nuestos clientes.

miércoles, 5 de septiembre de 2012

El día que nadie quiso creer en lo de aquí


Había que pagar el agua, estaba atrasada. También el servicio eléctrico y el telefónico. Primero se llevaron el agua, luego el teléfono. Las náuseas y los dolores de espalda incrementaron de solo pensar que tumbaran la luz. Esta es la historia de una pequeña empresa puertorriqueña que lucha por salir adelante en tiempos de crisis. La semana pasada fue buena, hubo para pagarle a suplidores, empleados y préstamos. Siempre hay dinero corriendo en la calle, pero no se sabe con certeza cuando llegará a la máquina registradora.
El dinero siguió corriendo y no llegó cuando se necesitaba. Las facturas estaban ahí, inertes y pedían acción.
Esos días los clientes no quisieron llegar. El dinero no entraba. Así de fácil es la ecuación. Siempre el negocio se mantiene operando, se trabaja fuertemente y se espera la remuneración, pero, a veces no llega.
Mientras esta pequeña y mediana empresa puertorriqueña pasa las de Caín, se realiza la convención demócrata, la semana pasada la republicana y así, cientos de sucesos que nos llevan al mundo de la fantasía, del american dream y del marketing. Siempre hay entretenimiento.
Sube el telón aparece Michelle Obama
La primera entrega republicana fue patética, la secuela demócrata mucho mejor. Más dramatismo, más pasión y mejor presencia escénica. Los protagonistas dominan el discurso político y logran conectar con la audiencia.
Acá, embelesados al son del poder mediático, de la sincronización y la adrenalina causada por la sencillez de unas palabras y el carisma que lo acompañaba.
No estamos acostumbrados a ese tipo de entregas. Esperábamos más ciencia ficción y nos presentaron un drama real que caló en el espíritu combatiente de muchos.
Igualdad, inclusión, lucha, solidaridad, compromiso, familia; son las palabras que puede usar cualquiera para lograr cierto grado de empatía. El mensaje de la primera dama se basó en eso. Imagino los donativos multiplicándose como un teletón o un canal de ventas donde magicamente van subiendo la cantidad de piezas vendidas.
Baja el telón, sigue todo igual
Paralelamente un pyme boricua ruega para que no le corten la luz y lleguen a reconectarle el agua y el teléfono que pagó con una tarjeta de crédito.
Esto no es ficción ni drama, es la dura realidad de los comercios locales. De la gente normal, de los que no tienen palas y de los que están desempleados porque no hay cama pa' tanta gente.
Esta pyme no quiere cerrar pero ganas no le faltan. Ese recién graduado no quiere irse de la patria pero no le queda opción, ese desempleado se reinventa pero tampoco encuentra salida ¿Dónde van a trabajar los graduados? ¿Habrá clientes para las pymes? ¿Cuál es la solución a esta crisis? ¿La dirán en la convención demócrata o la expresarán acá en un debate nuestros candidatos a la gobernación? ¿Le habrán cortado la luz a ellos? ¿Sabrán lo que es no tener un peso en el bolsillo?
Por lo menos los Obama hicieron un préstamo estudiantil. Acá los acompañamos con las deudas, el plástico y una desigualdad socioeconómica que cada vez se hace más grande. Hay gente que puede pagar fianzas de cuatro millones de dólares y otros, simplemente, agradecemos tener que comer.

domingo, 2 de septiembre de 2012

+pymes - tapón = desarrollo económico

Son las 7:00am y estás atrapado(a) en un tapón kilométrico. Es así todos los días. Sales a las 6:30am para llegar a las 8:00am al trabajo. Pierdes una hora y media de tu vida y parte del tanque de gasolina. Y todavía falta el tapón de las 5:00pm. Llegas a las 6:30pm a tu hogar para cocinar, comer, hacer alguna que otra cosa, bañarte y acostarte para enfrentarte a la misma rutina, día tras día. Esa es la realidad de miles de puertorriqueños que viven en la región centro oriental y trabajan en el área metropolitana.
Ese tapón, y el dinero que se pierde en productividad y gasolina, debe ser suficiente para repensar la manera en que se planifican las ciudades, los medios de transporte y la creación de empresas nativas.
Necesitamos fomentar la apertura de negocios locales que empleen gente de la región. El dinero que se escapa en cada tapón y el tiempo que pierden miles de padres que no pueden compartir con sus hijos por estar atrapados en la autopista debe ser prioridad para el gobierno.
Se habla de fomentar valores y de desarrollar la economía local pero solo los tapones, afectan ambas cosas.
No hay calidad de vida cuando estás tres horas guiando y ocho trabajando. Necesitamos más pymes abiertas, más auto empleo, más micro empresarios que generen dinero en su pueblo y se conviertan en motor de la economía.
A su vez necesitamos el compromiso de alcaldes y oficinas gubernamentales para que adquieran bienes y servicios en sus pueblos y de no haberlo en su pueblo, buscar en su región.
El desarrollo socioeconómico de nuestra patria está en la autogestión y el empresarismo. Los pymes generan más de 800,000 empleos, y el gobierno no se inmuta en darles la mano. Al contrario, el agua, la luz y el servicio telefónico es más costoso cuando se trata de una cuenta comercial.
Debemos fomentar las empresas comunitarias y el empresarismo en las escuelas. Que todos sepan que hay oportunidades para aquel o aquella que tenga un sueño. Necesitamos urgentemente una ley para proteger a los pymes y ayudarlos a crecer. El futuro de nuestro país está en la fuerza y el empeño de miles de micropymes y pymes. Solo falta visión y compromiso por parte de los gobernantes. Demuestren una vez y por todas su interés en lograr un mejor país: apoyen a la empresa local y apuesten a ella.